No existe falta de tiempo, existe falta de interés, porque cuando la gente realmente quiere, la madrugada se vuelve día, el martes se vuelve sábado y un momento se vuelve oportunidad
Supongamos que cada mañana te encuentras 1440 euros. Puedes regalarlos, divertirte con ellos, o quemarlos. Pero los que no uses al final del día desaparecerán. Así funciona la vida, la diferencia es que lo que te encuentras cada mañana no son 1440 euros, son 1440 minutos. Piensa bien lo que vas a hacer con ellos